Copio y pego desde Cuarto Derecha, que traduce de aquí:

La enfermedad del diseñador.

Adoro mi trabajo. Realmente lo adoro. No hay mucha gente que pueda decir lo mismo, por lo que poca gente consigue hacer de su afición una forma de vivir. Desde que tenía 13 años, quería ser diseñador gráfico y desde entonces sabía perfectamente qué tenía que hacer para conseguirlo. No era solo yo, tengo amigos que pensaron lo mismo.

A mí me parece que si eres diseñador, un diseñador de verdad, no alguien que aprendió a usar el Photoshop con llamadas de teléfono, entonces el diseño correrá por tus venas como un Pantone 7418. Pero es más que eso, está en todos los aspectos de la vida. No puedes parar de mirar todas las cosas con ojos de diseñador. Todo lo que haces está envuelto por esa cosa que llevas dentro.

Eso sí, no es nada malo. Pero me quedo fascinado por cómo esa cosa nos controla y quiero compartirlo con vosotros, majetes.

Entonces, ¿cómo es y cómo se vive con esta enfermedad? ¿qué consigue que tú hagas cosas que otra gente no hace? ¿cómo te afecta?

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